23 noviembre 2008

Una entre un millón (o dos)

Vuelvo de dar un paseo por el parque, como suelo hacer los fines de semana.

Camino despreocupado y en mi mundo cuando dos viecejillas me paran porque quieren darme una revista.

Reacciono tarde, volver de mi mundo es un viaje muy largo, así que ya tengo la revista en las manos y una de las viecejillas ya me está hablando de no sé qué.

Cuando aterrizo en este mundo, la primera frase que entiendo es

Viejecilla 1:

- '¿Y estás preparado para la otra vida? Porque primero debes dejar tus pecados en esta.'

Viejecilla 2:

- Abre la revista y podrás saber cómo...'

Abro mucho los ojos y ya veo que llevo una revista con el logotipo de una iglesia bastante famosa (ya saben que no me gusta dar publicidad en este diario). Así que pongo cara de no entender nada (la de costumbre) y poniendo nuestra nacionalidad extanjera como excusa, balbuceo un 'Yo no entender español' y trato de avanzar.

Pero (y aquí llega el gran pero, o sea que debería estar en mayúsculas)

PERO (ahora sí), la Viecejilla 1 es la única persona mayor de 60 años que, increíble pero cierto, SABE HABLAR INGLÉS!!!!

Me coge del brazo y empieza a decirme que estará encantada de practicar inglés conmigo (yuhú_ironía).

Así que ahí estoy yo, con cara de 'No me puede estar pasando esto' y soportando una charla sobre las magnificiencias de llevar una vida sana espiritualmente en inglés.

Quince minutos más tarde (sé que fueron 15 porque miré el reloj varias veces a ver si se daban por enteradas, pero no hubo manera) y tras multitud de asentimientos de cabeza por mi parte, llegué cerca de casa y las señoras comenzaban a darme sus últimos consejos.

A punto estuve de confesar todos mis pecados, los del vecino, los de todos mis amigos, los de los transeúntes que me miraban con pena pero aceleraban el paso cuando pasaban cerca, los del barrendero y los de toda la humanidad, por desesperación y con tal de que me dejaran ya en paz (descanse).

A punto de gritar: SÍ, YO MATÉ A LAURA PALMER!!! la señora que sabía inglés me soltó del brazo y con un 'god loves you' (no lo creo, señora, después de estos quince minutos, no lo creo) me dejó ir.

Y ahí me quedé, parado como un tonto (o sin como), sin saber qué hacer, pero con un sentimiento de culpa tan grande como la cabeza que me había puesto la señora.

Son buenos, sí, son muy buenos. No me extraña que haya tantos socios en ese club.

Y cuando llego a casa, Laura me pregunta qué hago con esa revista en las manos.

Penitencia, Laura, hago penitencia.

En serio, ¿cuántas posibilidades había de que una persona mayor de 60 años que, además es monja (no tengo nada contra ellas, pero ¿les llega el Home English a los conventos? ¿Convent English?) SEPA HABLAR INGLÉS??????????????????????????????????????

Creo que TODOS mis pecados (pasados, presentes y futuros) están perdonados.
'Yes, yes, yes, of course, of course, of course...'

Nos leemos en el siguiente,

Elliot.

7 comentarios:

Mj dijo...

En el principio el párroco vio a las monjitas.
Y las monjitas estaban desordenadas y en tinieblas (había habido un apagón).
El día segundo dijo el párroco: sea, que aprendan inglés.
Y el párroco vio que esto era bueno.
El tercer día el párroco pensó en mandarlas a un convento al extranjero.
Y el párroco vio que esto era bueno.
El cuarto día el párroco descubrió un sitio en Londres que se llamaba Covent Garden, y pensando que efectivamente era un convento, se dijo que era el sitio idóneo.
Y el párroco vio que esto era bueno
En el quinto día las monjitas tomaron un vuelo de Ryanair, que era el más barato, a lo que ellas llamaban Londinium
Y el párroco vio que esto era bueno (porque las monjitas eras unas pesadas).
En el sexto día las monjitas descubrieron al malabarista de las motosierras, al australiano buenorro que hace el robot, a los magos, equilibristas y demás personajes que pueblan la plaza. Para completar su aprendizaje del inglés, se fueron de copichuelas por la noche.
Y las monjitas vieron que esto era bueno.
Y el séptimo día, el de la resaca, descansaron.

(semanas más tarde vino lo del pecado original, pero esa es otra historia)

Laura Marta dijo...

¿Cómo no nos hemos dado cuenta de su poder después de ver tantas veces 'Sonrisas y lágrimas'?
Tanta canción y tanta historia, pero bien que nos vamos con el viudo rico, no?
Hummm, me pregunto si tienen sueldo, porque vivir en Covent Garden no debe ser barato. Ah! claro, que viven de las yemas de santa teresa y, perdonen la ordinariez, de sus propios pedos. ¿O no se comercializan en este país los "peditos de monja"?
Sí, puede que me lo haya inventado, pero lo cierto es que me suena...
¿Ryanair? ¿No viajan en escoba?
Ah, no, viajan encima del techo del autobús y nos persiguen allá donde vayamos...

Nos leemos,
Elliot.

Anónimo dijo...

¿que son los "peditos de monja" (a parte de lo obvio)?

Laura Marta dijo...

Me he informado y NO, no me lo he inventado. Son unos dulces que se venden, por lo menos, por las tierras del noreste de este país.
Entre un caramelo y una pasta de té y pueden llevar yema o no.
Total que de las monjas también se aprovecha todo.
Y no digo más...

Nos leemos,
Elliot.

Mj dijo...

Mmm yo había escuchado lo de las "tetillas de monja", q tb es un dulce, pero de los pedos no había nada...

Lo de las monjas subidas al techo del autobús (mimetizadas entre las palomas) es demasiado: no puedo pasar de reir!!

Mj dijo...

Erm... obviamente quería decir "no sabía nada", en vez de "había"... Es lo q tiene la dislexia combinada con estupidez congénita y un poco de artritis y parkinson (con personalidad múltiple) que me hace teclear lo que no quiero, como ahora: adhfañenfadliFWE9R´qeroejspfndfa3!! (yo no quería, era mi alter ego)

Laura Marta dijo...

Te etnideno ferpetcmnte.
Qeu mlaa es l etuspediz mezcaldo, no agatido.

By the way, ¿no puedes 'pasar' de reir?!!! Pues no pases, pero tampoco pares!!!

Nos someel,
Elliot.