11 mayo 2010

A la cárcel... Y dos veces!!

Voy a comprar, la nevera ya no aguanta más y me llora desconsolada y mi estómago más.

Llego al supermercado, como no tengo bolso tengo que dejar la mochila encerrada en una bolsa de plástico que me dan al entrar. Siempre veo bolsos más grandes que mi mochila, peeeero, parece que un bolso gigante no se puede robar.

Casi nunca cojo cesta, y menos hoy que sólo he venido a comprar pan y fruta.
Bueno, paso por un pasillo en el que veo un bote de aceitunas muy barato y se me antojan.

Camino hacia el pasillo del pan, en ese momento, el móvil suena. Pero el móvil está dentro de la mochila y la mochila está dentro de la bolsa de plástico. Así que no sé qué hacer.
En un momento pienso en pasar del móvil, pero la canción sigue sonando y se me ocurre que a lo mejor me llaman porque he ganado un premio o porque le van a dar un trabajo a Laura (compartimos Móvil), así que me decido, voy a coger la llamada.

Pero tengo la mochila dentro de la bolsa y eso significa que para sacar el móvil tengo que abrir la bolsa, pero estoy dentro del supermercado y eso está prohibido, así que salgo corriendo hacia la salida porque el móvil sigue sonando, así que tiene que ser importante.

Pero cuando voy a llegar a lo de la salida sin compra porque el móvil está dentro de la mochila y la mochila está dentro de la bolsa precintada, un pitido me paraliza.

NOOOOO!!!! Estoy saliendo del supermercado para que no me digan que rompo el precinto de la bolsa, pero se me ha olvidado dejar las aceitunas que están en mi mano y salta la alarma!!!!!!

Y es MUY, pero que MUY mala idea, tratar de salir de un supermercado corriendo como yo lo estaba haciendo!

El segurata me detiene, yo miro mi mano, veo las aceitunas y me pongo a gimotear. CÓMO NARICES LE EXPLICO LO QUE HA PASADO???

Elliot, todo seguido y casi sin respirar:
- No, señor segurata, no trataba de robar una lata de aceitunas, que cutre soy, pero no creo llegar a esto, sería poco menos que tocar fondo y todavía quiero explorar mis límites. Es sólo que... bueno, me sonaba el móvil y por ser legal y no abrir la bolsa precintada pues he salido corriendo para cogerlo, pero se me ha olvidado que llevaba una lata de aceitunas en la mano y ha saltado la alarma y por eso estamos usted y yo hablando en estos momentos... + sonrisa final.

Señor segurata:
- Ya, la verdad es que para robar una lata de aceitunas...

Elliot, con sonrisa final:
- Por eso, por eso...

Señor segurata:
- Anda, deja la lata aquí, quita la bolsa, coge el móvil y si quieres vuelve a entrar.

Elliot, sonrisa final haciéndose menos falsa:
- Gracias.

Y me voy aún con las piernas temblando, abro la bolsa, saco el móvil de la mochila y veo la llamada perdida. No reconozco el número y como es como de despacho, no llamo.

Pero suena de nuevo en ese momento. Lo cojo y al otro lado alguien me contesta:

- Hola, soy Félix Something, Something, le llamo de Moviscloud para preguntarle si está contento con su actual compañía de teléfono.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGG
No vuelvo a coger nunca más el teléfono!

Nos leemos en el siguiente,
Elliot.


04 mayo 2010

Absurdos nombres!

Laura a una compañera suya de clase:
- Jo, nunca me acuerdo de tu nombre.

Chica de cuyo nombre Laura no se acordaba:
- Laura.



Elliot, en un centro comercial:
- Tengo que hablar con el gerente, tenía un nombre compuesto, José Luis, me parece.

Dependiente de todo menos pendiente:
- Pedro Antonio?

Elliot:
- Emmmm, puede, puede, no lo voy a negar...

Nos leemos en el siguiente,

Elliot.